Siempre se ha estudiado en el colegio que el ser humano es omnívoro. Es decir que come de todo: carne, verdura, etc. Sin embargo, yo personalmente me considero básicamente carnívoro.
Claro que como de todo, por supuesto, y hay platos de verdura que están muy bien. Y frutas que me gustan mucho y todo eso. Pero es que la carne tiene algo que me embelesa.
De la encuesta que os puse yo hubiera marcado el chuletón.
Lo demás también está muy bien, pero a mí me pierde el chuletón.
Hecho al punto, con ese juguilllo propio de la carne carne. Con el toque de la sal gorda...
¡ Qué placer ! masticar esos jugosos y tiernos bocados.
Comiendo un chuletón de buena carne se experimenta la sensualidad de la comida. Es algo increible.
Es bueno equilibrar nuestra alimentación, y yo procuro hacerlo, pero he llegado a la conclusión de que tengo más de carnívoro que de vegetariano.
Ya direis ¡ vaya con el dietista !. Pues si, ya veis.
De todas formas la carne, como todo, es buena para la salud si se consume en su justa medida.
Bueno, ya me he dado el gusto de alabar uno de mis platos preferidos.
Tenía que hacerlo.
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